La subida de tipos de interés ha aumentado los costes de financiación, incrementando la presión financiera de las empresas. Esto podría tener consecuencias en su capacidad de pago, aunque abre puertas a nuevas fuentes de financiación alternativas, como los fondos de deuda.
María Rodríguez y Pablo Mañueco reflexionan sobre la financiación empresarial en su tribuna para El País.