Ofrecemos una visión global del patrimonio del cliente. Para ello, agregamos las posiciones en activos financieros y no financieros en las diferentes entidades financieras con las que trabaje el cliente, así como los mandatos y las posiciones en directo (acciones, bonos, estructurados, etc.) y/o en fondos de inversión. Este proceso de consolidación permite detectar potenciales duplicidades, así como déficits de inversión en alguna determinada categoría de activo.

Una vez que se cuenta con la foto global del patrimonio realizamos recomendaciones de inversión o desinversión en función de la visión para la situación de la economía y los mercados, así como de los objetivos de rentabilidad, horizonte temporal de inversión, necesidades de liquidez, de flujos de caja, etc.

Contar con una gestora propia nos permite también ofrecer un servicio de gestión discrecional de carteras a través del que materializamos directamente las decisiones de inversión y desinversión, informando al cliente de los movimientos y de la rentabilidad y riesgo con la frecuencia que éste desee.